En Downton Abbey la violencia está en una mirada, un puño que se cierra, un comentario…, todo dentro de las convenciones sociales. De manera que cuando la violencia se vuelve física, aunque mínima, apabulla.
Cuidado con ciertos amigos
Aléjate de «artistas» que gritan que el éxito es cosa de enchufes o felaciones. Si consigues algo, por poquito que sea, te odiarán.
Moralismo retrogrado / cine pueril
Hay cierto cine de Hollywood donde una infidelidad de un marido es tratada como una aventurilla de la que se arrepiente. La mujer lo descubre, se siente dolida y trata de vengarse con la misma moneda, pero no consuma la infidelidad. Ella se arrepiente antes o el guión se encarga de abortar la posibilidad: el marido llega a casa o el amante está en un atasco o la hija que está en Wisconsin dice que irá a casa por el cumpleaños de papá. La mujer pierde las ganas o reconsidera lo que iba a hacer y todos felices.
Este cine se niega a reflejar la vida aunque se vista de drama. Refleja la moralidad dual del guionista o el productor (lo del marido tiene perdón; lo de ella sería imperdonable). Es también un cine pueril porque no evalúa las consecuencias de una infidelidad. Y por supuesto, es un cine lleno de clichés.
La perfección y Antoine de Saint Exupéry (El principito)
La perfección no se alcanza cuando ya no queda nada por añadir, sino cuando no hay nada que quitar.
Antoine de Saint Exupéry